8 mayo 2017. Lunes de la IV semana de Pascua – Puntos de oración

La primavera es la estación del amor, del crecimiento de la vida. En plena primavera la Iglesia nos propone celebrar la Pascua, el maravilloso suceso de que Jesús ha resucitado y ha iniciado nuestra salvación. Este debe ser nuestro tema de oración cada día de este tiempo litúrgico. Hoy, con el salmo, podemos decirle a Nuestro Señor: “Mi alma tiene sed de Ti, Dios vivo”. En estos días de alegría, acerquémonos al Señor para expresarle nuestro amor, siempre tan pequeñito, tan rácano, pero también lo único, lo poco, que tenemos para ofrecerle. Señor, te amo poco, pero es que soy poco, ¡hazme más para poder amarte más! Porque sí, eso es lo que buscamos, su luz, su verdad, que nos lleven a su morada donde cantar sus maravillas, donde ser todo Suyo.

De esa manera, poniendo ese poquito amor que hay en nosotros, y venciendo esa soberbia que nos dice que por ser tan pequeño no merece la pena ofrecérselo a Dios, Él vendrá a nosotros para llamarnos por nuestro nombre, para ofrecernos su compañía. Y nosotros, como esas ovejas, callados, sin decir nada, simplemente adorando, o alabando con nuestros balidos, que no dicen nada, sino que simplemente cantan de alegría por estar con quien sabemos nos ama.

Archivo del blog